La plantación de árboles nativos aporta belleza, al mismo tiempo que proporciona alimento y refugio a la fauna local, reemplaza la vegetación perdida por los daños causados por las tormentas y reduce la erosión del suelo, lo que alivia la carga de los sistemas de aguas pluviales y ayuda a proteger el medio ambiente. Los árboles no solo marcan la diferencia en nuestra comunidad, sino que también proporcionan una sombra refrescante que puede ayudar a los propietarios a utilizar menos energía en el verano.